domingo, 27 de agosto de 2017

¿Y... ahora qué?

Resulta que algunos(as) (¿ex?) compañeros(as) del Partido me han preguntado sobre si mi sabático político, anunciado por acá hace unos meses, me hizo llegar ya, a alguna una conclusión.

La verdad, antes de poder contestar, no a ellos sino a mí mismo, esa pregunta, me hace falta tomar posiciones, respecto de algunos temas que son materia obligada de toda reflexión política, sea la de decidir si participo, una vez más, o no, en el proceso.

En ese sentido, algunas ideas que me atormentan para tomar una decisión, deben responder a mi interrogante de si "¿hay vida política, fuera del universo verde?". La respuesta es clara y obviamente que sí, sí hay vida, fuera de Liberación Nacional. Lo que habrá de concluirse, para acabar con mi tormento, será si esta vida es mejor, o no.

¿Qué es lo que debemos buscar con la política? Algunos(as), buscan un medio para convertirse a sí mismos en "influenciadores" y acceder al poder, local o nacional. Así, su camino lo trazan alrededor de complejas marañas de, no discuto que sean legítimas, aspiraciones a puestos dentro de la estructura del partido, como "único medio", según ellos(as), para poder influir sobre el devenir de su comunidad. En un plato, buscan "El Poder por el Poder mismo", y normalmente, una vez que lo logran, olvidar para qué lo querían... Siempre esa frase me recuerda una película famosa de los setentas, sobre la historia de un Candidato Presidencial en EEUU, protagonizada por Robert Redford, que una vez que ganaba, le decía a su consejero más cercano... "¿Y... ahora que?"

¡Yo no! (y puedo ser el más ingenuo e idiota que jamás militó en Partido Político alguno).

Aunque, cual bañista primerizo en el mar, fui arrastrado por la corriente, y terminé siendo parte de estructuras formales del partido, a nivel cantonal y en algunos procesos nacionales. Para seguir con el símil, esa mar me pegó tal revolcada, que por el tiempo que anduve pataleando para tratar de volver a salir a la superficie y respirar, no hice más que desperdiciar mi tiempo, para lo que yo (el idiota antes mencionado) había decidido en primera instancia, como razón para meterme a política... AYUDAR a mi país, a mi cantón, mi barrio... y así, poder heredar algo mejor a mi hija, dicho sea de paso mi chiquita, toda una profesional a punto de graduarse de ingeniera en la Universidad.

Lo primero que respondo, entonces, a mi mismo, es que la revolcada de la ola partidista, con sus corrientes encontradas, como asambleas distritales, cantonales, provinciales, para llegar a la anhelada Asamblea Nacional del Partido, fueron una enorme pérdida de tiempo, dolores, enemistades, gritos, insomnios y hasta arritmias cardíacas que, en nada, tuvieron relación con participar, en proyectos y reuniones, junto a presidentes de asociaciones de desarrollo, juntas de educación, comités de vecinos y autoridades medias de entidades públicas, para buscar solucionar, por ejemplo: problemas de titulación de tierras del estado en poder de familias por décadas que no aparecen a su nombre, o para lograr pelear por la falta de un EBAIS en el distrito más pobre y desigual del este de San José, o para tratar de reemplazar los viejos "medidores colectivos" que dan "energía eléctrica" (un bombillo por rancho) en tugurios o, para que no se enoje algún tecnócrata, asentamientos informales o no consolidados.

No, nadie me preguntó si era "asambleísta nacional" o "plenario" del partido, para poder aportar a mi comunidad. Lo que sí me pasó, es que el sólo hecho de militar en un partido, me convertía en "enemigo" a muerte de otros, o que, aunque fuera una buena propuesta, se votara en contra una moción mía, como regidor municipal, para dotar al cantón de la sede de Bomberos, o hacer u reglamento para multar a los que irrespetan parqueos para personas con alguna discapacidad con el objeto de obtener fondos para ayudar a esa misma población (según la Ley 7600), entre otras absurdas votaciones politiqueras , pero que me permitieron conocer el corazón de algunos mentirosos que se venden como líderes "independientes" (por pertenecer a un partido mal llamado cantonal, pero que manipulan, a los candidatos de turno de los partidos nacionales que critican), y que esconden tras discursos falaces, sus verdaderas agendas personales y en pro de sus "patrocinadores" (dueños) políticos. O sea, conocí la más oscura versión de seres humanos, que engañan y traicionan, por obtener un botín político y riquezas.

Hoy, mi experiencia, fuera de las olas furiosas de la política partidista, de la que aprendí que sólo los que tienen una buena "tabla de surf" (apellido o abolengo) o un buen "boogie" (padrinos), son los que llegan a la orilla, y no los babosos que, como yo, tratamos de cruzar a nado y a pata pelada; me hizo concluir que no ocupaba tanta carajada.

Hoy, me reúno a diario con diputados, autoridades de instituciones públicas, autónomas y descentralizadas o autónomas, municipales, con ministros, presidentes ejecutivos, alcaldes y regidores, HASTA EL PRESIDENTE... Ahora, hasta me hicieron, sin pedirlo y sin pelearme con nadie, parte de un Comité Ejecutivo de una Agencia para el Desarrollo, en pro de formar una Zona Económica Especial en una región del país rica, pero olvidada.

Hoy soy testigo de la buena voluntad de muchos de estos personajes, voluntad que no sale en las noticias, y que, cuando comprueban convencidos que no somos vivazos tratando de salir en "la foto", sino ciudadanos, empresarios, cooperativistas, agricultores y profesionales, jalando para un mismo lado, por hacer realidad el único proyecto político que vale, EL DESARROLLO DE SU REGIÓN, SU CANTÓN Y SU PAÍS, se arrollan las mangas, para juntos, sacar, sin mezquindad, la tarea. Para ver el rostro de los jóvenes que estudian con animo, esperanzados en no tener que abandonar a sus familias y a su novia del cole, para hacer una vida digna y, porqué no, próspera, en su barrio de niño.

Esa si que es la política que añoraba... la que antes, hace mucho, estaba en los partidos, en los movimientos, las mentes y los corazones, de los verdaderos estadistas, de esos que ya no están más... Hoy, encontré una playa tranquila, con un mar calmo y turquesa, que me deja nadar... hacia donde las fuerzas y las ideas, me permitan...

jueves, 25 de mayo de 2017

Yo SOY FEMINISTA!

Feminismo. (Definición RAE)
Doctrina y movimiento social que pide para la mujer el reconocimiento de unas capacidades y unos derechos que tradicionalmente han estado reservados para los hombres.

Machismo (definición RAE)
Actitud o manera de pensar de quien sostiene que el hombre es por naturaleza superior a la mujer.
Sinónimos:: falocracia.

En esta época, que se habla de igualdad de género, derechos humanos y demás eufemismos con los que tratamos a temas como el machismo y la dscriminación descarada de la mujer, me gustaría sacar de mi pecho y cerebro (perdón por presumir de algo que seguro no tengo mucho), estos tormentosos pensamientos.

Primero. Los hombres y las mujeres NO somos iguales, pensamos, percibimos y sentimos las cosas de forma diferentes. Precisamente, porque la mujer y el hombre se complementan. Si la rosca de la manguera es igual a la del grifo del tubo, no habría manera de empatarlos y no serviría de nada, el uno sin el otro.

Precisamente, en la diferencia y su aceptación, es donde podemos empezar a vislumbrar una salida a la incomprensión que, por siglos, se ha manifestado y promovida, por la fuerza, por la sociedad machista.

Si ven la diferencia de conceptos, entre lo que busca el movimiento feminista, versus lo que significa el machismo, entenderemos que ambos son incomparables.

La defensa de los machistas, históricamente, se ha basado en la fuerza corporal, para decidir el lugar al que, según el, debe “permanecer” la mujer. Lo ilógico, es que el mandarla a hacer labores de ama de casa, ha demostrado que la fuerza, incluso física, está más del lado de la mujer.

Segundo. Es injustificable que al llegar casi al primer cuarto del siglo 21, que una mujer con la misma inteligencia, experiencia académica y laboral, se le pague menos por la misma posición y labor que a un hombre. Que a la hora de contratar para un puesto, siempre se valore a priori, el escoger a un hombre, antes que a una mujer, "porque los hombres no se embarazan..." o ese tipo de prejuicios e idioteces.

Tercero. Ahora... en otros aspectos de la vida, hay unas pocas  mujeres que desvirtúan sus justas luchas por igualdad de derechos y condiciones, abusando de la legislación que han logrado aprobar, pues han hecho de sus embarazos y el producto de ellos, sus hijos, un "negocio" y su modus vivendi, para luego extorsionar a los hombres, solicitando en estrados judiciales, pensiones alimentarias exageradas. Pero, como hay hombres que creen que las mujeres son un objeto, de placer, trabajo y sumisión, han hecho factibles dichos abusos, en generalizaciones odiosas, en que pueden caer muchos jueces y tribunales de familia.


Resultado, el que muchos hombres sean objeto de prisión preventiva, cayendo en un círculo vicioso y de abusos del sistema, por parte de unos y otros. Estrategia equivocada de las mujeres y estrados judiciales, que no entienden que un hombre encarcelado, no puede trabajar para pagar la pensión… 

Esto sucede, en mi muy personal, humilde y no sé cuán equivocado, criterio, porque, básicamente hay PERSONAS buenas y malas. Sin distinción de género, condición social, económica o preferencia sexual, política o religiosa.

martes, 2 de mayo de 2017

Sabático obligado

“La estrella que nos guíe, costarricenses, es el bienestar del mayor número.”
Don Pepe Figueres

Está ya no es la estrella de Liberación Nacional...

Fui liberacionista desde que nací. Por convicción en los ideales y la carta fundamental del Partido. Los mismos que expuso, allá en los años 40's, El Centro de Estudios de los Problemas Nacionales y el Movimiento de Liberación Nacional.

Por creer en los escritos y actos del estadista José Figueres Ferrer. Porque me ilusionaba el pensamiento y la obra de Rodrigo Facio, Daniel Oduber Quirós (Benemérito de la Patria), Jorge Dengo, Francisco Orlich...

Trabajé, como guía, desde la primera campaña de Luis A. Monge Álvarez. Desde entonces, de una u otra manera, sin pretender puestos relevantes ni exigir nada a cambio, en todas las campañas contribuí, como miembro de mesa, fiscal general, asambleísta, delegado y presidente cantonal, candidato a vice alcalde, delegado presidencial y regidor municipal.

Trabajé colaborando en asuntos comunales, con los despachos de buenos diputados como Mayi Antillon, Francisco Chacón, Carolina Delgado Ramirez, Antonio Alvarez Desanti... con labores "ad honorem" en la gestión en gobierno de Oscar Arias y Laura Chinchilla.

Fui hombre de partido, militante comprometido... más de 12 campañas entre elecciones nacionales, asambleas distritales y convenciones internas, asambleas cantonales y provinciales, fiscal en Asambleas Nacionales (aunque nunca he sido asambleísta nacional)... hasta la campaña del referéndum como vocero del partido.

Entonces creo que merecidamente, me gané el derecho de cuestionar, tanto a la dirigencia, como a los precandidatos y candidatos, funcionarios de elección popular representantes del partido y a las autoridades.

Expreso lo anterior, en vista del resentimiento que muchos, otrora compañeros de lucha, me han expresado, dado que no comulgo, y con honestidad lo expreso, con el rumbo que sigue el partido desde hace años.

Siempre fui crítico, incluso como regidor, de acciones como la Trocha o Crucitas, cuando hasta los otros regidores, no liberacionistas, callaban...

Más aún, me reprochan el no apoyar, como si nada, al precandidato que resultó electo en el proceso de la última convención.

Será que no me conocen bien, aunque algunos de los que hoy hasta saludarme les cuesta, si saben quién soy.

Me pueden acusar de impulsivo, soñador, iluso, tonto, vehemente y loco. Pero no de de desleal, marrullero, hipócrita ni nada parecido.

Aprendí a perder, como regidor de oposición, casi todas las semanas, por seis años. Perdí con don Carlos Manuel Castillo, con José Miguel Corrales, con Rolando Araya, y si no hubiese renunciado antes, también siendo coordinador cantonal de la campaña de Johnny Araya. Lo aprendí, porqué gané muchas veces, también.

Don Antonio mismo (o David Garita R), podría decir si soy desleal o interesado, cuando me pidió ayudar en Curridabat, incluso cuando me pidió disciplina partidaria en las líneas de partido que me dictó, igual que Carolina y Francisco.

Algunos, incluso, saben que renuncié no una ni dos, sino a las veces necesarias a aspiraciones personales legítimas, como a la presidencia cantonal, ser delegado cantonal a la Asamblea Provincial, además acepté responsabilidades y candidaturas que yo no quería, porque el partido y su dirigencia me lo pidió.

Hoy, con dolor, digo que me sustraigo. Entro en sabático indefinido. En este periodo, valoraré mi militancia, pues veo muy lejano, el comulgar con el rumbo del PLN y con acciones, como las tomadas por la fracción legislativa actual.

En política, como en ninguna actividad humana, nadie es indispensable. Se que yo no represento nada dentro del partido y a pocos les importe mi decisión. Solo quería que supieran el porque de la misma.

Me siento desmotivado... mis ideales no son los mismos del actual Liberación, ni las maneras para lograrlos, ni los objetivos...

Un abrazo a todos...
JoseSo.

lunes, 10 de abril de 2017

¿El fin del PLN?…

Por JoseSo (José Solano S., ex regidor, Presidente Cantonal en Curridabat y militante)

Yo alcancé a nacer en la década de los sesentas. Para entonces, los planteamientos y premisas del llamado Movimiento de Liberación Nacional, planteados por personajes como don Rodrigo Facio, don Daniel Oduber Quirós o don Pepe Figueres Ferrer, empezaban a disfrutarse a plenitud, después del nacimiento de la Segunda República.

El movimiento aglutinaba a trabajadores, campesinos, movimientos estudiantiles, gremios y cámaras de pequeños productores, pequeños y medianos empresarios nacionales, sindicatos, se empezaban a desarrollar las cooperativas. Emergía una fuerte clase media, producto del acceso universal a la educación formal universitaria, la salud, vivienda digna, créditos bancarios para emprendimientos, insumos básicos para la agroindustria, se desarrollaba infraestructura, puentes, caminos, electricidad en los lugares más recónditos.

Estos elementos de una nueva realidad nacional, fueron producto de decisiones impulsadas desde el seno de un partido socialdemócrata, pero ajustados a nuestra realidad, tropicalizado. Ejemplos sobran: La nacionalización de la banca, la creación del ICE, de la CNFL, abolición del ejército que permitió la inversión en educación, construcción en todos los pueblitos del país de escuelas y colegios académicos y técnicos y de educación superior de la UCR, UNA.

Apuestas novedosas para la época, en la que todavía no se hablaba de calentamiento global ni protección del ambiente, como la política de conservación de los Recursos Naturales con la Ley de Parques Nacionales y conexas, la apuesta a las energías limpias y renovables como la hidroeléctrica, son la base de nuestros activo más valioso, nuestra naturaleza.

Época en la que se adoptan medidas, bajo las que se pretende un modelo de desarrollo inclusivo y solidario, generador de oportunidades, con la creación del IMAS, se crea el aguinaldo universal y Asignaciones Familiares. No sólo logran el modelo, se consolida.

El éxito radica en que tenemos una población educada y saludable, con una institucionalidad democrática robusta, producto de un respeto a la división de poderes, que crea un clima propicio para la inversión y el desarrollo.

Amenazas externas, producto de la dependencia inevitable de las superpotencias, al ser un pequeño país, en una región de importancia geopolítica, nos obligan a hacer ajustes, pero sin traicionar las bases del modelo. Se empieza a apostar por la diversificación del modelo monocultivista agroexportador, por un proceso de sustitución de exportaciones y diversificación de la actividad económica.

Sin embargo, esclavos de nuestro propio éxito, se nos excluía de la asistencia internacional de los Estados Unidos, que obligó a usar estrategias por contactos internacionales de nuestros líderes, para entrar, por la puerta de atrás, a iniciativas regionales como la Iniciativa de la Cuenca del Caribe.

La visión de los líderes de recambio, no sólo de Liberación Nacional, sino de los grandes hombres que guiaron a la oposición a sostener los acuerdos “país” intrínsecamente, como los José J. Trejos Fernández, o los Mario Echandi, entre otros, ya no es la misma. Es más cortoplacista, egocéntrica y calculadora. La influencia de la inevitable enajenación cultural de la potencia del norte, es ya abrumadora.

A partir de la segunda mitad de los años ochenta, estando ya en mi etapa universitaria y empezando la laboral, se empieza a sucumbir a las imposiciones de organismos internacionales, a los Planes de Ajuste Estructural, la era de los modelos importados y tentaciones del consumismo extremo, con las importaciones, ya no de insumos productivos, sino de las de bienes suntuosos e innecesarios, pero tentadores. Estos empiezan a enriquecer a un sector, y empobrecer a otro… el más grande.
Liberación Nacional, no es la excepción. Es penetrada. Hoy ya totalmente secuestrada.


Continuará…

jueves, 6 de abril de 2017

Una historia corta... y triste!

Érase una vez un partido político que nació por defender la libertad del sufragio... y pasaron los años y las décadas...
Cuando las cosas no iban como a ellos les gustaba, o convenía, un grupo de ese partido, gritaba: "Fraude... Fraude..." y exigían seguir con los recuentos y acusaban a sus contendientes internos... y renunciaban, una y otra vez...
Pero, cuando eran otros los que pedían contar los votos, en los procesos que si les gustaban a ellos, decían que contar manualmente "no es necesario... en este partido todo es transparente..." y se indignan de que se desconfíe...
En ese mismo partido, se alinean los grupos, que antes eran enemigos, cuando conviene sacar a otro del camino... Pero esa alianza, está pegada con alfileres... alfileres de ego...
Fin de la historia...
Es ficticia, cualquier parecido con sujetos o eventos reales, es mera coincidencia!