Por JoseSo
Ante la renuncia de Rodrigo Alberto Carazo como presidente del PAC, a mí me surge una inquietud que concierne al partido en el que milito desde mi juventud, Liberación Nacional.
Sean las razones que tenga, porque no está de acuerdo con el rumbo que otros le dan al partido, el peso de ser gobierno, incongruencias notorias entre el discurso y la práctica o razones personales (como adujo), lo que aplaudo de Rodrigo Alberto Carazo, es la dignidad que demuestra NO estar pegado a la silla del nuevo partido oficialista, cosa poco común en el mundillo político, sin juzgar que motivos tienen los que “se les regó la goma loca en la bolsa de atrás”.
Desgraciadamente, en el PLN, nuestro presidente, a quien no tengo la más mínima animadversión, parece que le sucede exactamente lo contrario.
A quienes llevan muchos años detentando el poder de representación del poder en las estructuras del PLN, parece que se les nubló el juicio y la dignidad política (ojo... NO la dignidad personal).
Ante los graves cuestionamientos de corrupción y en materia ética, injustos algunos, pero muchísimos JUSTIFICADOS, el PLN ha hecho la del avestruz, pues su "cabeza" parece sumergida en la tierra, dejando descubierto y vulnerable su cuerpo.
Ha sido la base, la dirigencia, la que ha tenido que, una vez más darle la cara al pueblo, ante las odiosas generalizaciones del presidente, que hizo teniendo techo de vidrio (o casa de cristal, como él mismo dijo, paradójicamente), o con denuncias en algunos casos exageradas o con "verdades a medias", que resultaron "mentiras completas".
Mientras tanto, el presidente y el resto de Directorio Político guardan un silencio sepulcral... Y, especialmente en política, "el que calla, otorga..." o al menos esa es la impresión que da.
De nada sirve el valiente ejemplo de DIGNIDAD POLÍTICA de Pérez Rubalcaba y mucha dirigencia del PSOE, partido hermano del PLN en España, que sin ser necesariamente los responsables personales, le dieron UN ESPACIO a nueva dirigencia comprometida, para devolverle la confianza y credibilidad al partido, que al igual que el PLN del pasado, hicieron grande a su país.
Me hace esto recordar la frase de nuestro gallardo libertador y fundador, don Pepe: "Si uno no vive como piensa, acaba pensando como vive.” Don Bernal Jiménez, sé que usted piensa como socialista democrático y que es un gran defensor de nuestra democracia, pero demuéstrelo, viva como piensa y deje su espacio a nuevos liderazgos... hasta ahora, usted está "pensando como vive".
Pensamiento extensivo a los aspirantes a la silla... aquellos que ya tuvieron la papa en la mano, y ahora pretenden entronizarse.
Abran el espacio a nueva gente, que devuelva la esencia ETICA e IDEOLÓGICA al partido... no soy yo, ¡es la patria la que se los pide!... porque la medicina que el pueblo tuvo que escoger, ¡parece ser peor que la enfermedad!
