Por JoseSo
El pasado 4 de febrero, como en todo el resto del país, Curridabat fue convocado a las urnas para elegir autoridades municipales del Concejo Municipal, Sindicaturas y Alcaldía. El resultado debe ser analizado con cuidado porque no se trata de algo simple.
¿Qué nos dijo el pueblo de Curridabat?
Bueno, lo primero que nos demostró es que hay un importante grupo de electores que está absolutamente decepcionado de su gobierno local, tanto que no se acercó el 74,58% de los curridabatenses inscritos en el padrón, colocando a Curridabat como el cuarto lugar a nivel nacional en nivel de abstencionismo.
Las razones, muchas. Desigualdad social, inseguridad, caos vial, bolardos que sistemáticamente benefician a unos comercios o locales de oficinas, pero perjudican a otros. O las políticas de ordenamiento territorial tan mal manejada que más bien parece desordenamiento territorial.
También se refieren a que, de forma general, los demás partidos, en especial los tradicionales, están en crisis. Se evidenció una cultura de preferencia por el voto a favor de opciones políticas locales, sobre las nacionales. De esto ahondaré mas adelante.
El pueblo que sí ejerció el voto, le dijo al oficialismo que ya no confían plenamente en ellos y mi percepción es que solo mantuvieron la alcaldía por la terquedad y el egoísmo de actores políticos locales que no quieren soltar sus pretensiones e intereses personales y disgregaron el voto por el cambio entre cuatro opciones, que habiéndose unido solo 2 de ellas, bajo una bandera con un limpio y creíble historial, habrían ganado con facilidad.
¿Ganó Siglo XXI?
No, aunque para los efectos prácticos conserva la alcaldía, perdió más de dos mil votos en referencia al proceso electoral anterior, lo que acentúa su deterioro sostenido, pasando de más de 7 mil votos y 4 regidores en 2010 a poco más de 3 mil votos y 2 regidores en este 2024. Reiteramos, situación que no fue capitalizada en este y anteriores procesos, por la falta de visión y el egocentrismo partidario de los otros partidos, en especial del PLN, lo que le pasó factura a nivel nacional también, perdiendo incluso territorios antes seguros como Cartago o el mismísimo Cantón Central de San José.
¿Quién perdió?
Claramente el PLN y el PUSC a nivel de Partidos, ambos con un bajísimo techo de opiniones favorables de los electores a nivel nacional… y, además, el pueblo de Curridabat, por creer que no salir a votar hará recapacitar a los actores políticos para que vuelvan su mirada a las prioridades correctas. En el caso del oficialismo, seguirán auto engañados en creer que su política pública principal (el cuido de las abejitas que a todos nos parecen simpáticas e importantes), no debe ser la seguridad ciudadana y el Desarrollo Humano inclusivo y sostenible.
Pero, volviendo a los Partidos, el PUSC pierde, en menor proporción que Liberación Nacional, porque mantuvo un caudal histórico, que hace 4 años se vio beneficiado por la buena candidatura de don Gerardo Álvarez, que logró aglutinar a líderes de otros partidos (como el mismo PLN) hoy bajo la bandera del Partido Gente Pro Curri principalmente. Esto a pesar de la frescura y juventud de su carismática y firme candidata, Andrea Vargas.
El tema del PLN, que mantiene su escasa representación municipal de un regidor, que sigue marcando su tendencia acelerada a la baja. Esto por cuanto a pesar de su millonaria inversión en signos externos, apenas le alcanza para superar al PUSC y a los novatos Gente Pro Curri y ADN, estos últimos, para mi, los grandes ganadores. También ese desgaste se debe a la falta de claridad y transparencia cuando, de forma oportunista, a dado sus votos para mantener a Siglo XXI en la presidencia del Concejo, o hasta asumir la presidencia con los votos oficialistas, sin asumir nunca su postura de oposición, responsable y no obstruccionista, pero si firme; a cambio de cálculos electorales y apoyos y no el bien de las grandes mayorías olvidadas.
¿Alguien ganó?
Cómo terminé afirmando en el párrafo anterior, electoral y moralmente los ganadores fueron dos partidos nuevos. Uno nacional, ADN qué concentró su estrategia en barrer en su distrito más fuerte, Granadilla.
ADN es un caso de análisis por su apuesta a brindar espacio a nuevos liderazgos, pero con la mirada puesta más allá de lo local, tratando de consolidarse como opción política para el quehacer nacional y formando posibles candidatos a diputados y otras instancias.
El otro, el para mi contendiente más fuerte de cara al futuro, Gente Pro Curri.
¿Porqué?
Fácil, ya el cantón tiene una cultura de votar por partido local. Ante el desgaste de Siglo XXI, agrietado y dividido profundamente a lo interno por su nepotismo y codicia de poder por el poder en sí mismo (según los más de 60 líderes que se apartaron públicamente del Partido, incluidas ausencias en campaña y las criticas del ex alcalde Edgar Mora y del actual Alcalde Jimmy Cruz), con una deteriorada estrategia y abandonado por sus propios fundadores; el pueblo curridabatense tiene una nueva alternativa, mezcla de experiencia y nuevos liderazgos. Pero, sobre todo, los dirigentes comunales de amplia trayectoria, antes militantes obligados en otros partidos, tienen ahora un espacio SIN DUEÑOS y legítimo en Gente Pro Curri, Partido al que no le importan sus pasados partidistas, sino su acción comunal y honestidad probada. Todo esto, con un techo de crecimiento muy alto, del que no gozan los partidos tradicionales, tanto los nacionales como el oficialista local, Siglo XXI.
Esto lo logra a pesar de las enormes trabas que tuvo en su proceso de consolidación formal ante el TSE, que lo hizo entrar MUY TARDE a hacer campaña, SIN RECURSOS ECONÓMICOS, pero con un excelente equipo humano.
Y lo hace sin ataques personales, sin críticas malintencionadas, con PROPUESTAS atrevidas pero serias.
Ahora, Gente Pro Curri depende de si mismo. Accede a un poquito más de recursos para competir en mejores condiciones, de tiempo y financiamiento, por su bien ganada deuda política.
Pero, sobre todo, depende de su compromiso con la comunidad. De sus acciones, liderazgo positivo, propuesta programática, capacidad de diálogo con las demás fracciones y su capacidad de mantenerse como la opción más viable de lograr consensos y comunicar eficientemente su acción política honesta y permanente, no como ha sido la costumbre de los partidos taxi que son utilizados por viejos políticos que cambian de bandera como de calzoncillos.
Y al pueblo, le toca su tarea de informarse, de exigir, de vigilar y asumir la responsabilidad ciudadana de participar de la política local para garantizar su propio bienestar y el de sus vecinos, amigos y familiares.
José Antonio Solano Saborío
Ex Regidor Municipal y analista político
